Los religiosos pasionistas somos los herederos del sueño de San Pablo De la Cruz, a lo largo de estos trescientos años de fundación la pequeña congregación que dejó San Pablo De la Cruz ha ido creciendo hasta rincones inesperados del mundo. Los religiosos pasionistas contemplamos la Pasión de Cristo y anunciamos su Evangelium con la vida y con el apostolado, actualizándola en comunidades apostólicas por todo el mundo: «nuestra misión se orienta a evangelizar mediante el ministerio de la Palabra De la Cruz, a fin de que todos puedan conocer a Cristo y el poder de su resurrección, participar en sus sufrimientos y configurarse a Él en su muerte para alcanzar su gloria» (Const. 3)
Nuestra congregación de los religiosos pasionistas se extiende en los cinco continentes, en más de 63 países, con más de 400 comunidades y poco más de 1800 religiosos.
La congregación se ha extendido, saliendo de Italia inicialmente en Europa por lo países de Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Francia, España, Irlanda, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Ucrania.
Posteriormente se ha expandido en el continente Americano a finales del siglo XIX y a lo largo del siglo XX: nos encontramos en Argentina, Brasil, Bolivia, Canadá, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, México, Panamá, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay, Venezuela.
Es en el S. XX que se expande la congregación a África, estando en Angola, Botswana, en R.D. del Congo, Kenya, Mozambique, Sudáfrica, Tanzania y Zambia.
En Asia los pueblos han recibido el anuncio de los pasionistas con un gran florecimiento de vocaciones, especialmente en India, Indonesia, Filipinas, últimamente en Vietnam y China. También se está presente en Australia, Corea del Sur, Japón, Nueva Zelanda, Papua y nueva Guinea.